miércoles, 23 de diciembre de 2009

¡Qué hago acá!


Padre, ¿existe acaso el infinito,
En el que no se hable de un final,
El que no termine en un punto,
Ni en la muerte natural?
Por qué lo dices criatura de Dios
Hay algo que no quieras terminar,
Que deseas nunca se acabe?
Sí, mi existencia, para poder luchar
Y ayudar a mi país
A tanta gente, pobreza infeliz
A su perdón inconsciente
A tanta niñez dar
Hoy y solo hoy
una oportunidad
Padre, ¡existe acaso el perdón final,
La culpabilidad final,
Soy acaso el criminal,
O la victima insensata?
Soy la niñez inocente
Con una mirada de luz
Que se apaga en el crecer
¡Qué soy señor!,
¡Qué hago acá!.